Seis candidatos de la oposición venezolana que se presentarían a las elecciones parlamentarias de septiembre, así como otros dos pertenecientes al partido del presidente Hugo Chávez, no podrán participar en esos comicios tras haber sido inhabilitados políticamente.
La Contraloría venezolana --a cargo de vigilar las finanzas públicas-- ha publicado recientemente en Gaceta Oficial la inhabilitación de dos miembros del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV, en el poder) y de tres opositores, entre los que se cuentan varios ex gobernantes locales.
Además, tres comisarios policiales que se habían postulado por la oposición también quedaron inhabilitados en mayo, luego de que se ratificara su condena a 30 años de cárcel por las muertes ocurridas durante el golpe de Estado del 2002, que sacó a Chávez del poder por dos días.
En la mayoría de los casos, la Contraloría señala como razón de las inhabilitaciones el incumplimiento de responsabilidades administrativas inherentes a los cargos ocupados por los afectados, como la no presentación de la declaración jurada de bienes.
Sin embargo, la Mesa de la Unidad Democrática, que reúne a los principales partidos de oposición, denuncia que las inhabilitaciones son una estrategia para debilitarla y teme que el gobierno siga usando este método para ``sacar del tarjetón electoral a los postulados de oposición de mayor arrastre''.
En el caso de los inhabilitados oficialistas, se destaca el ex alcalde Numa Rojas, cuya candidatura a las parlamentarias ya había sido retirada por el PSUV. Mientras que entre los opositores está el ex gobernador de Zulia (oeste), Manuel Rosales, asilado en Perú.
Los afectados no podrán presentarse a cargos de elección pública por períodos que van desde los seis meses hasta los ocho años o más.
Antes de las elecciones regionales del 2008, cientos de políticos, la mayoría de oposición, también fueron inhabilitados por el contralor.
Fuente: El Nuevo Herald
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