La Federación de Asociaciones de Periodistas de España (FAPE) manifestó ayer su“preocupación” por el hostigamiento a los medios de comunicación en Venezuela y, concretamente, por la orden judicial de detención del presidente de la cadena de televisión Globovisión, Guillermo Zuloaga.
La presidenta de la FAPE, Elsa González, adelantó a Efe la resolución tomada por la directiva de esta organización en una reunión ordinaria celebrada ayer.
“La FAPE -explicó González- confía en que la orden judicial por un presunto caso de usura no esconda en realidad un nuevo ataque a la libertad de expresión y de opinión de la cadena Globovisión”.
Las autoridades venezolanas han emitido una orden de detención contra Zuloaga por un caso de “usura” como propietario de un concesionario de coches.
Sin embargo, la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) y la Asociación Internacional de Radiodifusión (AIR) consideran que es una “represalia política” porque esa cadena es crítica con el presidente de Venezuela, Hugo Chávez.
González recalcó que la FAPE se solidariza con los editores y periodistas que impulsan en Venezuela la función que los medios de comunicación ejercen en las sociedades “como motores de información, opinión, debate en libertad y conocimiento”.
Asimismo, el presidente de la Academia de Televisión de España, Manuel Campo Vidal, dijo hoy que la orden de detención de Zuloaga es el último paso de una “escalada de agresión” del régimen chavista contra la cadena, con la “coartada” de una acusación por usura.
En declaraciones a Efe, Campo Vidal se refirió a las agresiones sufridas al menos cuatro veces por las instalaciones y personal de la cadena en los últimos años, y a la salida de Alberto Federico Ravell del canal en febrero pasado, cuando era director del mismo.
“Zuloaga -recordó el presidente de la Academia- ya prescindió de Alberto Federico Ravell, el director de Globovisión, en realidad un destacado periodista opuesto al régimen de Chavez”.
Sin embargo, subrayó, Chávez “no ha tenido suficiente con ese sacrificio de Ravell, a mi modo de ver injusto, sino que ahora ha ido a la cabecera de Globovisión: Zuloaga, aunque lo relacionen con otras actividades”.
En opinión de Campo Vidal, es “muy común” en Latinoamérica que los editores y propietarios de canales de televisión tengan otros negocios ajenos a la comunicación, como en este caso de automóviles.
Por su parte, el presidente de la Asociación de la Prensa de Madrid (APM), Fernando González Urbaneja, insistió hoy en que la situación de las libertades en Venezuela es “anómala” y la prensa tiene “evidentes dificultades” para hacer su trabajo.
Según González Urbaneja, “el Gobierno venezolano ha hecho gala de persecución de la prensa opositora, lo cual significa nulo respeto a las libertades”, y ése es su “programa general” respecto a los medios.
EFE
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